Las fracturas de hueso o un hueso roto, se producen cuando una fuerza ejercida contra un hueso es más fuerte que lo que el hueso puede soportar. Esto causa una perturbación de la estructura y resistencia del hueso, conduciendo al dolor, pérdida de la función y en ocasiones, a hemorragias y lesiones alrededor del sitio fracturado.
Existen diferentes tipos de fracturas óseas, algunas más graves que otras. La gravedad de una fractura dependerá de la fuerza que causo la ruptura.
Las fracturas más comunes son de muñeca, tobillo y la cadera. Las fracturas de cadera ocurren con mayor frecuencia en personas mayores. Un hueso roto toma alrededor de 4 a 8 semanas para sanar, dependiendo de la edad, salud y el tipo de ruptura.
Tipos de fracturas
Los tipos más comunes de fracturas son:
- Fracturas estable. El hueso no ha traspasado la piel y los extremos rotos están apenas fuera de lugar.
- Fractura abierta o fractura compuesta. El hueso roto sobresale a través de la piel. La piel puede ser perforada por el mismo hueso, o por un golpe que rompe la piel en el momento de la fractura. El hueso puede o no quedar visible.
- Fractura transversal. Tiene una línea de fractura horizontal.
- Fractura conminuta. El hueso se rompe en tres o más piezas. Este tipo de fractura es de lenta curación.
- Fractura palo verde. Es una pequeña grieta delgada en el hueso.
- Fracturas por estrés. Se producen a menudo en el pie, pierna o brazos, como resultado del esfuerzo repetido de ciertas actividades.
- Fractura oblicua. Este tipo de fractura tiene un patrón en ángulo, ya sea curvo o inclinado.
- Fracturas por compresión. Se produce cuando dos huesos esta pegados uno con otro. Los huesos de la columna de la columna vertebral, llamadas vertebras, pueden presentar este tipo de fracturas. Las personas mayores, particularmente aquellos con osteoporosis, presentan mayor riesgo.
Causas más comunes de fracturas
- Osteoporosis. Las personas que padecen de osteoporosis presentan huesos débiles y los hace más propensos a fracturas.
- Incidentes traumáticos. Accidente automovilístico, caídas, lesiones deportivas.
Síntomas comunes de fracturas
Muchas fracturas causan mucho dolor causando incapacidad para utilizar la extremidad lesionada. Además, los síntomas dependerán del hueso en particular y la gravedad de la lesión.
Otros síntomas pueden incluir:
- Hinchazón.
- Moretones.
- Deformidad.
- Sensibilidad alrededor de la zona.
Complicaciones de fracturas
Otros problemas causados por una fractura de hueso puede incluir:
- Pérdida de sangre.
- Lesión de órganos, tejidos o estructuras circundantes. Por ejemplo, órganos del tórax pueden lesionarse si se rompe una costilla.
- Retraso en el crecimiento del hueso. Si un niño se rompe un hueso largo cerca de la articulación donde se encuentran las placas del crecimiento.
Diagnóstico
Durante la consulta el médico realizara un examen físico para evaluar su estado y el alcance de la lesión. La forma más común para evaluar o confirmar el diagnóstico de fractura, es con la toma de radiografías, ya que proporciona imágenes claras de los huesos.
Tratamiento
El objetivo del tratamiento para una fractura, es asegurarse de que las piezas de hueso estén en su posición y evitar el movimiento hasta que estos sanen. Pero algunas fracturas complicadas pueden requerir de cirugía o tracciones quirúrgicas (o ambas).
El tipo de tratamiento requerido dependerá de:
- Gravedad de la ruptura.
- Si se tratara de una fractura abierta o cerrada.
- El hueso involucrado.
Dependiendo de donde ocurra la fractura y que tan severa es. Por ejemplo, una fractura de columna se tratara de manera diferente a una fractura de piernas o brazos.
El tratamiento puede incluir:
- Inmovilización. Es el tipo más común de tratamiento de fractura inmovilizar la fractura con yeso. Para mantenerlos en la posición correcta mientras se curan.
- Férula. Permite el movimiento de las articulaciones cercanas limitada o controlada. No es para todas las fracturas.
- Tracción. Se utiliza generalmente para alinear un hueso o huesos por una acción de tracción suave y constante. Es la opción menos común.
- Fijación externa. Tornillos de metal se colocan por encima y por debajo de la lesión para conectarlos con una barre de metal por fuera de la piel.
- Fijación interna. En este procedimiento fragmentos de hueso se vuelven a colocar en su lugar mediante la inserción de barras en el centro del hueso. Y se mantienen unidos con tornillos o placas de metal en la superficie exterior del hueso.
Recuperación
El tiempo de recuperación de una fractura es de varios meses para sanar, dependiendo de la lesión y del apego a las indicaciones médicas.
Una vez que se le haya quitado ya sea el yeso o un aparato ortopédico puede que aun deba de seguir limitando el movimiento hasta que el hueso está completamente sanado. En ocasiones se llega a perder la fuerza muscular de la parte lesionada, pero con la realización de algunos ejercicios específicos podrá recuperar su fuerza normal.